Los arquitectos de Bohlin Cywinski Jackson, reconocido estudio estadounidense que ya ha colaborado con Apple en la concepción de las tiendas de Nueva York y Londres, han planteado el local siguiendo la estructura del de la Quinta Avenida. La famosa entrada-cubo, emblema del local neoyorkino, ha sido sustituida en Shanghai por un cilindro de cristal, que conduce a un local subterráneo situado bajo una céntrica plaza del distrito financiero de Lujiazui en Pudong.
Y también en este caso, una impresionante escalera de caracol, hecha de acero y cristal, conduce a los atónitos clientes a un gran espacio comercial donde diseño y tecnología se unen para deleite de los muchos fans incondicionales de la marca de la manzanita. Como atractivo añadido para los Apple-adictos, la tienda de Shanghai ha destinado una parte importante de su espacio al Genius Bar, uno de los más grandes en comparación a otros locales de Apple.