Arquitectura de container, en la revista Experimenta

Experimenta es una revista sobre Diseño Gráfico, Industrial, Arquitectura y Comunicación Visual. El primer número de la revista vio la luz en 1989. Es una publicación trimestral que se dirige a arquitectos, profesionales del diseño, prescriptores del marketing y la comunicación y otros agentes relacionados.

La revista combina una revisión de la actualidad del diseño con textos escritos por algunos de los mejores teóricos del diseño. De esta manera, los lectores de la revista están al tanto de las últimas novedades en el tema abarcado.

En Lombok nos gusta mucho esta revista porque nos encanta estar al día de las novedades del sector. Contamos con sus ejemplares desde el comienzo de la agencia. Desde que supimos de la existencia de la revista, podemos decir que han cambiado el formato, como podemos ver, por ejemplo, en el caso de las últimas publicaciones (que son los que aparecen en las imágenes de abajo).

Arquitectura de container

Hoy vamos a hablaros sobre uno de los últimos artículos publicado en su página web que nos ha parecido interesante, que abarca el tema de la Arquitectura de container. Y es que el artículo trata sobre el primer y mayor complejo comercial del mundo construido a base de contenedores de mercancías: Common Ground. Está situado en Seúl y se han usado 200 contenedores para llevar a cabo su construcción. El complejo cuenta con dos edificios, el Street Market y el Market Hall, los dos diseñados en base a la arquitectura de container. Aún así tienen características diferentes. En el primero destacan los módulos individuales, consiguiendo un mayor impacto exterior. Por su parte, el segundo, está construido a base de grandes módulos de 12 metros que se utilizan como cabinas de compras independientes.

Hay que decir que la construcción de este gran complejo comercial de 5.300 metros cuadrados supuso un gran desafío arquitectónico para Urbantainer, el estudio que se hizo responsable del proyecto. Por una parte, la arquitectura a gran escala a base de contenedores es habitual en proyectos más reducidos que en este caso. Pero además de ésto, había que demostrar que las percepciones asociadas a este tipo de construcciones estaban distorsionadas, por lo tanto, era necesario crear una imagen de marca positiva.

El trabajo entre especialidades de diferentes ámbitos ha hecho posible la fusión entre el diseño del espacio y el concepto de marca. Toda la estructura se ha proyectado como un gran espacio abierto que permite la existencia de escenarios de uso multifuncional.

Por último, simplemente mencionar que la forma en que los módulos están diseñados permite su reutilización una vez que son desinstalados, por lo que se pueden crear nuevos modelos de negocio. Las estructuras son móviles, económicas y beneficiosas medioambientalmente.

Si queréis leer el artículo de Experimenta al completo podéis entrar en su página web.

Fuente vía Experimenta