Un diseño tan elegante que los arquitectos “Wolveridge”, nos lo han querido presentar con el estilo más clásico, en blanco y negro. La vivienda se encuentra ubicada en la ciudad de Victoria, en Australia y fue construida hace ya unos años durante el pasado 2003.
Un proyecto de grandes dimensiones que se adapta a la perfección a su situación. Reside entre una pista de tenis y una amplia zona verde adquiriendo todo el protagonismo de su calle gracias a sus fuertes y pronunciados contornos.
La construcción en un terreno pendiente nunca ha generado ningún problema para Wolveridge Arquitects, los cuales en esta ocasión combaten el reto diseñando la estructura de tal manera que es el propio edificio el que actúa como muro de contención.
Un panel de hormigón puro se establece como entrada del edificio, sorprendiéndonos e imponiéndose con un aspecto extremadamente serio.
Su diseño se ha basado en los ambientes costeros y por ello el edificio utiliza materiales naturales como la madera de cedro. La cual se introduce de tal modo que acaba compenetrándose con naturalidad a los paneles de hormigón que permanecen con su peculiar acabado sin pulir.
En cuanto al consumo de energía la vivienda es bastante eficiente gracias a los beneficios que le aportan sus ventanas de doble acristalamiento además de caracterizarse por sus paneles de hormigón que la aíslan de la temperatura exterior.
Una residencia que parece integrarse al completo a pesar de poseer unas dimensiones importantes y una estructura diseñada con mucho carácter.
Los grandes ventanales están muy presentes en el diseño pero la construcción ha sido diseñada para ofrecer máxima privacidad a sus residentes. Además de este factor, la cara norte de la vivienda es fría y es la parte que se encara a la calle residencial, por ello esta se mantiene más bien protegida por sus enormes paneles de hormigón.
La estructura, no da lugar a satisfacer a las pupilas curiosas, la vivienda permanece sin aberturas visibles desde el exterior. Debido a esta importancia concedida sin reparo a los residentes la cara posterior de la vivienda es muy distinta a la cara frontal, dejando espacios abiertos al exterior en todas sus estancias.
En la planta baja nos aguardan dos habitaciones dobles dotadas con sus propios y completos baños in-suite, una sala de billar dónde poder entretenernos durante horas, la habitación de la colada.
También descubriremos dos zonas exteriores una cubierta y acristala en su totalidad con puertas correderas, destinada a convertirse en una zona de juegos y una terraza descubierta para gozar de las vistas y la vida exterior.
En la planta superior nos sorprende de nuevo con su generosa distribución que se divide en un amplio dormitorio doble con su propio baño in-suite, una impactante sala de estar, la cocina, un baño completo, un estudio y un ropero al que podemos acceder como si se tratara de una habitación.
No sé tú, pero a mí ya me ha convencido. Su diseño interior es nítido, contemporáneo y moderno. Los espacios se muestran claramente definidos por sus líneas rectas y liberación de contornos.
Cada una de las estancias rebosa en espacio vital, con el que se crea un ambiente relajado y acogedor al mismo tiempo.
Además dispone de un completo garaje que posee cabida para el aparcamiento de dos coches y hasta incluso un carrito de golf.
Rodeada de una fantástica área verde de césped la residencia se completa con su propia pista de tenis.
Te dejo con los planos de la vivienda para que puedas acabarte de enamorar de la vivienda si es que aún no lo estás.
Vía: Hogarisimo