¿Sufren vuestros padres o abuelos -o, ya puestos, vosotros- de vista cansada? ¿Hipermetropía? ¿Astigmatismo?… Pues eso no es nada comparando con las carencias oculares que la mayoría de los jóvenes actuales podrán llegar a padecer al alcanzar una edad más que madura.
Y todo a causa de las pantallas de los ordenadores, móviles, tablets, etc., a las que nos vemos expuestos 24 horas al día desde hace algún tiempo.
El problema está en el exceso
Muchos de nosotros pasamos ocho horas trabajando delante del ordenador, y para más inri al llegar a casa, en lugar de desintoxicarnos un rato de las nuevas tecnologías, lo primero que hacemos es seguir con la fiesta… en este caso se supone que relacionada con el ocio.
El daño que estas pantallas pueden producir en nuestros ojos a largo plazo todavía está por ver. Lo que está claro es que no podemos cambiar el presente ni el futuro, y, si no cambia mucho la cosa, seguiremos viviendo una era digital por muchos años.
No panic
¿Alguna vez habéis tenido algún episodio de visión un tanto extraña como el no poder leer lo que pone en la pantalla de vuestro ordenador o comenzar a ver pequeñas formas de colores y destellos de luz?
Tranquilos, no entréis en estado de pánico. Son claros síntomas de fatiga visual. La buena noticia es que se pasa.
Para evitar estos malos ratos, no obstante, te vamos a presentar un ejercicio diseñado por el optometrista californiano Jeffrey Anshel:
La regla 20-20-20
El consejo de este profesional consiste en apartar la mirada del ordenador cada 20 minutos para dedicar 20 segundos a mirar hacia una distancia de 6 metros y volver a realizar la misma operación al cabo de otros 20 minutos de ordenador. De ahí el nombre.
Es un buen truco para descansar los músculos oculares y evitar la fatiga visual.
Otros consejos para prevenir la fatiga visual
- Usar gotas para los ojos: Nuestros ojos se secan mucho ante las pantallas, por lo que muchos expertos recomiendan el uso de lágrimas artificiales para mantener los ojos hidratados.
- Ajustar el brillo de la pantalla: Es recomendable regular la luz que desprende el dispositivo con el que trabajamos y ajustar el brillo a un nivel en el que nos sintamos cómodos.
- Letras grandes: Cuanto menos esfuerzo hagan nuestros ojos, mejor. Aumentar el tamaño de la letra en nuestro ordenador ayuda a realizar un menor trabajo ocular.
Fuente: Muy Interesante