El ser humano, de por sí, tiende siempre al orden y a la simetría, ya que suele resultar más agradable de ver que algo caótico y desigual. Esto no es nada artificial que haya creado el hombre, sino un sistema de proporción que la naturaleza
El ser humano, de por sí, tiende siempre al orden y a la simetría, ya que suele resultar más agradable de ver que algo caótico y desigual. Esto no es nada artificial que haya creado el hombre, sino un sistema de proporción que la naturaleza