Ya queda menos para que te sientes en tu butaca, se apague la luz, te metas un buen puñado de palomitas a la boca y se te ponga la carne de gallina al escuchar, aún sobre fondo negro, los primeros acordes de una de las
Ya queda menos para que te sientes en tu butaca, se apague la luz, te metas un buen puñado de palomitas a la boca y se te ponga la carne de gallina al escuchar, aún sobre fondo negro, los primeros acordes de una de las